El último Unpacked de Samsung rompió la norma no escrita de la compañía y sacó a escena tres nuevos plegables. Es cierto que nos quedamos con ganas de ver el triplegable, pero igualmente tenemos tres teléfonos donde quizás el que más llama la atención es el nuevo Galaxy Z Fold7. No solo es el plegable más potente de la compañía, sino que es el más fino hasta la fecha. Todo sin renunciar a ser un teléfono muy resistente.
A medida que los dispositivos van siendo más y más finos, existe cierto temor por parte del consumidor por si eso implica que son más frágiles. Ya sabemos que este será capaz de aguantar 500.000 pliegues, pero ¿y qué tan resistente es su estructura o sus pantallas? Un canal de YouTube lo ha puesto a prueba con test bastante extremos y, sorprendentemente, ha salido prácticamente ileso de todos.
Resistente incluso a la congelación o a las corrientes de agua

El canal de YouTube al que hacemos referencia, llamado Gupta Information Systems, se ha puesto serio con el último plegable de Samsung, sometiéndolo a auténticas "torturas" que se quedan muy lejos de lo que podemos considerar un uso normal del dispositivo. Sin embargo, nos permite ver cómo ha sido el trabajo de Samsung diseñando y construyendo el dispositivo.
La primera prueba consiste en colocar el teléfono en agua y meterlo a congelar durante más de 12 horas. Su protección IP48 nos dice que es bastante resistente al agua, pero aquí subimos de nivel un poco más congelando el líquido y dejando ahí el dispositivo durante un buen número de horas. Sorprendentemente, el teléfono funciona perfectamente, sufriendo unas leves marcas en el interior, pero nada en el interior.
La siguiente prueba no se queda atrás. Los responsables de este canal lanzan el dispositivo a las aguas de un río con corrientes relativamente fuertes y lo dejan sumergido durante 30 minutos. Ni el paso del agua, ni elementos como arena y rocas le hacen absolutamente nada. El dispositivo sigue funcionando e incluso sus bisagras, que son teóricamente el punto más débil, no sufren ningún problema.
Tras esto, el dispositivo se sumerge y se expone a nueve líquidos bastante comunes como son el café, el té y el agua (tanto fría como caliente). También se prueba contra caídas de casi 2 metros e incluso a pruebas para intentar doblarlo, pero supera a todas con muy buena nota. Impresiona mucho que un dispositivo plegable y tan delgado sea tan resistente.
Es obvio que lo recomendable para cualquier dispositivo es usarlo y llevarlo en nuestro día a día con una funda protectora, pero este tipo de pruebas deja claro que Samsung ha hecho un gran trabajo construyendo el dispositivo. Si el futuro de la compañía sigue en el mismo camino que este Fold7 o el S25 Edge, está claro que no tenemos que preocuparnos porque los dispositivos sean delgados. Van a ser muy resistentes igualmente.
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