Durante mucho tiempo, poner la lavadora era para mí una de esas cosas que haces sin pensar: cargaba la ropa, pulsaba un botón y a otra cosa. Ni miraba la hora ni me preocupaba de si estaba pagando más o menos por la luz. Hasta que un mes, al ver la factura eléctrica, algo me hizo clic. Me picó la curiosidad y empecé a fijarme.
Dependiendo del momento del día, la diferencia en el precio del kilovatio puede ser bastante seria. Y ahí fue cuando me dio por probar la app SmartThings de Samsung, que ya usaba para otras cosas, pero nunca se me había ocurrido aplicarla a la lavadora.
Conectar la lavadora a SmartThings fue más fácil de lo que pensaba
Aunque no seas especialmente manitas con la tecnología, emparejar la lavadora al móvil es muy sencillo. Abres la app, escaneas un código que viene en la máquina y en cuestión de minutos ya puedes controlarla desde el sofá.
No sólo encenderla o apagarla, sino también ver el estado del ciclo, cambiar de programa o dejarla lista para más tarde. Todo muy sencillo, sin tener que trastear demasiado.
La IA que se fija en el precio de la luz (y te ahorra dolores de cabeza)

La verdadera clave no está únicamente en poder manejar la lavadora desde el móvil, sino en cómo la app se adapta a tu día a día.
Dentro de SmartThings hay una función llamada SmartThings Energy que tiene bastante sentido: consulta el precio de la luz según la tarifa que tengas y te sugiere las horas más baratas para poner la lavadora.
En mi caso, sólo tuve que dejarla cargada por la mañana y permitir que ella misma decidiera cuándo era mejor arrancar. A veces lo hacía de madrugada, otras al final de la tarde. Pero lo mejor de todo es que yo no tenía que estar pendiente ni haciendo cálculos.
Con el tiempo, la app aprende cómo sueles lavar
Otra cosa muy interesante es que, con el tiempo, SmartThings empieza a reconocer tus costumbres. Si siempre eliges el programa rápido o el modo eco, lo recuerda. Incluso te sugiere cambios si ve que podrías ahorrar más energía con otro ciclo según la carga o el tipo de ropa.
Y si hay una franja especialmente barata que tú no has visto, te avisa. Al final, más que una app, parece alguien que te echa una mano para que no tires dinero sin darte cuenta.
Desde que uso SmartThings con la lavadora, me olvido del reloj y del contador de luz. La ropa se lava cuando más conviene y yo no tengo que hacer nada extra. A final de mes, la diferencia en la factura se nota, sobre todo si, como en mi caso, pones varias coladas a la semana.
Imágenes | CoPilot, Dall-E
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