No solo importa elegir bien el aire acondicionado: también su sitio. Este es el mejor para que funcione mejor y gaste menos

Puede que en tus planes no hubiera un aire acondicionado, pero hace con tanta ola de calor, lo normal es que te hayas decidido por instalar uno. Elegir el mejor aire acondicionado pasa por una serie de procesos y búsquedas, sobre todo si queremos lo mejor para casa (y sin pasarnos de nuestro presupuesto, claro). Sin embargo, hay un punto que solemos pasar por alto y que es igual de importante: donde lo vamos a colocar.

Este tipo de equipos se compone de dos elementos: uno exterior (el compresor) y uno interior (el split). Muchos usuarios piensan que da igual donde colocar este último en la habitación que queremos enfriar más, pero nada más lejos de la realidad. Os vamos a dar una serie de consejos prácticos para que podáis elegir el mejor sitio para vuestro aire acondicionado.

La altura y evitar obstáculos, clave

El aire acondicionado, por ley, lo debe poner un instalador titulado. Lo normal es que sea este el que nos aconseje cuál es el mejor lugar para colocarlo, tanto en lo que respecta a la unidad exterior como al split de dentro. Para ello, lo normal es que no solo tenga en cuenta las necesidades estructurales o de colocación, sino también cuál es el mejor lugar para tener el mejor rendimiento.

Ahora bien, lo suyo es que tengamos algunas lecciones aprendidas para elegir la mejor posición. Lo que hay que tener en cuenta, en primer lugar, es que ambas unidades están conectadas por tubos (por los que circula el gas) y donde también debe haber un desagüe para la evacuación de los condensados.

¿Cuál es la mejor posición para el compresor? Evidentemente, tenemos que encontrarle un lugar fuera de casa. Lo idóneo es que esté bien ventilado, lejos de aquellas zonas donde pueda acumularse el calor. Además, también es recomendable reducir al máximo la distancia entre el compresor y el split, puesto que así se evitan pérdidas energéticas.

La elección de ubicación para el split tiene varias cosas a tener en cuenta. Lo primero es que, dentro de lo posible, lo ideal es colocarlo en una ubicación central de la habitación o área que queramos enfriar. De esta forma, el frío se distribuye mejor por todo el espacio y permite enfriar sin necesidad de utilizar el aire a más potencia o durante más tiempo.

Además, también debemos protegerlo dentro de lo posible de los rayos solares. Aunque pueda no parecerlo, la altura también es otro punto clave a tener en cuenta. Va a depender de nuestra vivienda, pero lo idóneo es tenerlo a una altura de 1,8 a 2,5 metros con respecto al suelo. También facilita de esta forma que podamos limpiarlo y mantenerlo correctamente.

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También es interesante que evitemos cualquier obstáculo. Aquí nos referimos, sobre todo, a elementos como muebles o cortinas, ya que podrían bloquear el flujo del aire y reducir la eficiencia del mismo. Conociendo todo esto, lo tendremos muchísimo más fácil para decidir dónde queremos nuestro aire acondicionado. Incluso antes de que venga el instalador.

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