Hacer la maleta, imprimir las tarjetas de embarque, cerrar bien los grifos, bajar persianas, echar un último vistazo al frigorífico… Antes de irnos unos días fuera, solemos seguir una especie de rutina para dejar la casa en condiciones. Sin embargo, hay detalles que se nos escapan más veces de las que creemos. Uno de ellos, y bastante habitual, es cómo apagamos el aire acondicionado justo antes de marcharnos.
En los equipos de Samsung, un fallo que se repite cada verano es más común de lo que parece: se apaga el aire desde el mando sin comprobar si hay programaciones activas o si el modo seleccionado es el correcto. A simple vista, parece que ya está todo listo, pero en realidad el equipo puede quedarse "medio encendido" sin que te des cuenta.
Apagar no siempre significa apagar

Muchos usuarios, antes de salir de casa unos días, apagan el aire pulsando el botón de encendido del mando a distancia. Lo que no todos saben es que, en algunos modelos de Samsung, esta acción no siempre borra las programaciones que puedan estar activas, ni desactiva funciones como el temporizador o el reinicio automático. En la práctica, el aire queda apagado… hasta que algo lo reactive.
Por ejemplo, si hay un corte de luz mientras estás fuera, algunos equipos Samsung están configurados para volver al último estado en el que se encontraban. Y si ese estado era "encendido", es muy posible que el aire se reactive sólo. Esto no es un únicamente gasto innecesario, sino que puede hacer que el equipo esté funcionando días enteros sin supervisión.
El modo correcto de dejarlo todo cerrado

La forma más segura de evitar este tipo de problemas es apagar el aire desde el panel físico o desde la app SmartThings, si tu modelo lo permite. De este modo, te aseguras de que no quede ningún modo activo en segundo plano. Además, conviene borrar cualquier temporizador o programa de encendido automático que pudiera estar configurado por rutina.
Si utilizas SmartThings, puedes incluso crear una escena para "modo vacaciones", en la que el aire se apague completamente y quede fuera de juego hasta que tú decidas reactivarlo manualmente. Esta opción es especialmente útil si compartes casa o si tienes varios dispositivos conectados al mismo sistema.
Otros errores que conviene evitar

Además de apagar mal el aire, hay otros detalles que vale la pena revisar antes de salir de viaje. Por ejemplo, no limpiar los filtros antes de ausentarse es otro fallo frecuente. Si dejas el equipo sucio y luego lo enciendes al volver, no sólo consumirá más, sino que forzará el sistema innecesariamente justo cuando más lo necesitas.
Otro punto importante es no desconectarlo del todo si la zona donde vives sufre tormentas o picos de tensión. Aunque los modelos Samsung cuentan con protección interna, una subida de tensión inesperada puede provocar fallos o incluso averías si el equipo está conectado sin vigilancia.
Si tienes un Samsung, aprovecha las funciones que ofrece: temporizadores, modos inteligentes, control desde el móvil… y evita dejarlo todo a medio camino. Un par de minutos antes de cerrar la puerta pueden marcar la diferencia entre volver a casa con todo en orden o encontrarte con una sorpresa innecesaria.
Imágenes | Freepik AI
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