Estos son los cinco errores que casi todos cometemos al poner el lavavajillas. Así puedes solucionarlos

El lavavajillas es uno de esos electrodomésticos que prometen hacernos la vida más fácil: metes los platos sucios, añades detergente, pulsas un botón… y listo. Sin embargo, muchas veces no obtenemos los resultados que esperamos. Especialmente cuando no prestamos atención a los pequeños detalles, como por ejemplo, la falta de sal.

Platos con restos de comida, vasos con marcas de cal o utensilios dañados son problemas habituales, pero casi siempre se deben a errores sencillos que podemos evitar. Con unos cuantos ajustes, tu lavavajillas puede dejar tu vajilla impecable y alargar la vida útil del aparato.

Cinco errores que es mejor evitar al utilizar el lavavajillas

Cargarlo de cualquier manera

Uno de los errores más frecuentes es colocar los platos y utensilios sin pensar en la distribución. Amontonar la vajilla bloquea el paso del agua y del detergente, lo que hace que algunas superficies queden sucias. Los platos grandes y ollas pesadas deben ir en la parte de atrás o en el fondo de la bandeja inferior, mientras que los vasos y tazas se colocan en la superior.

Los utensilios pequeños tienen su espacio en la cesta específica, con los cuchillos y cucharas bien separados para que el agua llegue a todos lados. Una buena organización marca la diferencia en la limpieza y evita que tengas que lavar a mano después.

Usar detergente de más o de menos

No todos los detergentes son iguales, y la cantidad que usamos es clave. Poner demasiado puede dejar restos blancos en los platos y vasos, mientras que poner muy poco no eliminará la grasa ni los restos de comida.

Además, hay detergentes en pastilla, en gel y en polvo, y cada uno funciona mejor con un tipo de agua diferente. Consulta las instrucciones del fabricante y ajusta según la dureza del agua en tu zona. Un simple ajuste en la dosis puede mejorar notablemente los resultados.

Ignorar la limpieza del filtro

El filtro del lavavajillas retiene restos de comida y grasa que, con el tiempo, pueden obstruir el flujo de agua y reducir la eficacia del lavado. Muchos usuarios olvidan limpiarlo regularmente, y eso puede causar malos olores o platos sucios.

La buena noticia es que limpiarlo es fácil: solo hay que retirarlo, enjuagarlo bajo el grifo y, si hace falta, usar un cepillo pequeño para eliminar la suciedad más pegada. Hacerlo una vez al mes o cada pocas semanas, dependiendo del uso, mantiene el aparato funcionando como el primer día.

Colocar utensilios sensibles en la posición equivocada

Algunos utensilios requieren un cuidado especial. Las copas delicadas, los cuchillos de cocina o las sartenes antiadherentes pueden dañarse si se colocan en la bandeja equivocada o en contacto con otros objetos. Por ejemplo, las copas finas se pueden romper si chocan entre sí, y los utensilios con recubrimiento antiadherente pueden rayarse.

Cada lavavajillas tiene recomendaciones específicas sobre dónde colocar estos objetos para protegerlos y al mismo tiempo permitir que se limpien correctamente. Seguir estas indicaciones puede evitar disgustos y prolongar la vida de tu vajilla.

No enjuagar platos muy sucios

Aunque la mayoría de los lavavajillas modernos puede manejar restos de comida, grandes trozos o salsas pegadas pueden obstruir el filtro y reducir la eficacia del lavado. Por eso, es recomendable hacer un enjuague rápido antes de meter los platos más sucios. Esto no significa lavar a mano, solo eliminar restos grandes con agua corriente. Así, el lavavajillas podrá concentrarse en limpiar grasa, marcas y residuos, dejando todo reluciente.

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Usar correctamente el lavavajillas no es complicado, pero pequeños descuidos pueden afectar su rendimiento y la limpieza de la vajilla. Distribuir bien los objetos, usar la cantidad adecuada de detergente, mantener limpio el filtro, colocar los utensilios delicados en su lugar y enjuagar platos muy sucios son pasos sencillos que marcan una gran diferencia. Con estos consejos, tu lavavajillas trabajará mejor, tus platos quedarán impecables y tú ahorrarás tiempo y esfuerzo.

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