A nadie le gusta que sus electrodomésticos amarilleen. Este truco es la solución para devolverles su blanco natural

Hay cosas que delatan el paso del tiempo más que otras. Y si tienes algún electrodoméstico Samsung blanco en casa desde hace unos años, seguro que ya sabes de lo que hablo: ese color marfil que ahora tiene y que no quiere irse ni con estropajo (no lo vayas a frotar con un estropajo, que lo rayarás; es sólo una forma de hablar).

Por suerte, existe un truco bastante sencillo que puede devolverles su blanco original sin tener que gastar dinero, porque se puede hacer con algo que muchos ya tenemos en nuestra casa.

Porque el color blanco acaba siendo amarillento

Lo primero que hay que saber es que ese tono amarillento que les sale a algunos electrodomésticos no es por casualidad. Hay varios culpables detrás. Uno de los principales es el sol. Sí, la luz solar directa, con el tiempo, va haciendo de las suyas y cambia el color original del plástico y otros materiales.

Pero no es sólo el sol. También influye todo lo que se va acumulando en la cocina: humo, grasa, restos de comida… Todo eso se va pegando poco a poco a las superficies, y al final, el blanco brillante pasa a ser una especie de amarillo. Y también hay que tener cuidado con algunos productos de limpieza, porque usar los que no tocan puede acabar dañando el acabado.

A todo esto hay que sumarle el paso del tiempo. Ya que, aunque los cuides, los materiales, sobre todo los plásticos, envejecen. Y cuando eso pasa, lo normal es que pierdan ese color limpio del primer día.

Cómo devolverles el color blanco

Lo que vamos a utilizar para conseguir que vuelva el color blanco a ese electrodoméstico que ahora se ve amarillo es la crema de agua oxigenada, un producto que hay en muchos hogares.

Lo mejor es probarlo primeramente en una zona pequeña y discreta, y si acaba funcionando, entonces ya centrarse en el resto del electrodoméstico.

Se aplica una capa uniforme con un pincel y después se cubre con film transparente, dejándolo actuar durante 24 horas. Después de ese tiempo se retira el plástico y se eliminan aquellos restos que queden con un paño seco.

Hay ciertas ocasiones donde puede ser necesario repetir el proceso para que quede totalmente blanco. Puede ser necesario realizar este lavado un par de veces tres para que se llegue al tono que queremos.